Nuestro reto aterriza en Asturias

Jueves, 2 de septiembre de 2021

A pocas horas del comienzo de la primera etapa, llegamos al aeropuerto de Oviedo, no sólo con nuestro equipaje y mi bici, sino con el deseo de que estas horas pasen pronto y ya podamos comenzar el reto en Pamplona, donde comienza nuestra primera etapa que nos llevará a Logroño.

Tengo una sensación extraña, me siento muy contento, mas aun contentísimo, pero nada nervioso, aunque tampoco me ha dado tiempo, ya que he estado super agobiado en estos dos últimos días realizando algunas gestiones.

Tengo que decir que para mí este reto es muy importante.

¡Significa mucho!

No sólo por el tiempo, que han sido 9 meses de entrenamiento, desde el mes enero de este año, cuando se lo comenté a mis compañeros Jesús y Raúl, sino por la motivación y superación que supone para mí y para otras personas.

Ha sido un largo camino hasta hoy, un camino con momentos difíciles, un camino de risas y cómo no, un camino de aprendizaje.

Y sobre todo, de mucho agradecimiento, donde me he encontrado gente super buena que han creído en mí y me han apoyado en todo momento.

Detalles que nos toca ultimar antes de la cuenta atrás

Ha sido un placer nuestro primer encuentro con Carmen y Ángel, de Paraíso Caravaning, que nos han trasladado a Gijón en la misma autocaravana que será mi casa y la de mi equipo en estos días del Camino a Santiago.

El siguiente paso fue ir a recoger las bicis de Jesús y Raúl que alquilamos en Gijón.

Cuánta felicidad se siente al tener en nuestras manos a la compañera que te va a conducir por tantos kilómetros y más, verla ya anclada en la autocaravana.

Las horas se nos pasaron volando y a media tarde tuvimos que sentarnos a repostar energías en un restaurante junto al estadio Molinón. Aquí ya empezamos a planificar los pasos del día siguiente.

No podíamos desperdiciar las horas de luz que nos quedaban, así que nuestra siesta consistió en ponernos manos a la obra.

  • Compra de los alimentos básicos para ese día.
  • La preparación de la autocaravana con los dos vinilos con la publicidad del reto, cedidos por VS Impresiones y, por supuesto,
  • El montaje de mi bici que se trasladó conmigo desde Tenerife.

Como anécdota, sin ni siquiera probarlas, nos encontramos con un pinchazo en una de las bicis de mis compañeros de ruta, pero también fue solucionado sobre la marcha.

Incluso se acercó un señor interesado por nuestra actividad y charlamos un poco del reto, muy simpático se despidió diciendo que le diéramos recuerdos a Santiago cuando llegáramos al final.

Entre montaje, café, fotos y prisas, mi equipo me entregó un regalo por mi pasado cumpleaños.

¿Qué será, qué será?

¡Un jersey con una bici bordada…oh my God!

El reto marcha hacia Pamplona

Aún quedaba por hacer la distribución de la ropa y objetos personales de cada uno.

Nuestros equipajes, medio llenos de los suplementos, cedidos por Distrifarma, ocuparon ya un lugar preferente.

Poco a poco, la autocaravana se convirtió en nuestro hogar.

Otro cafecito y a rodar que teníamos 4 horas y media por delante y la lluvia también quiso hacer presencia.

Para hacer la ruta lo más amena posible, pusimos música y cantamos, pero nos dimos cuenta de que ser artistas no es lo nuestro. Al final, fue una forma de liberar el estrés y también hay que decirlo, para no “dejarnos dormir” de tanto cansancio.

Eran las 23:30h cuando miramos el reloj en Pamplona y aún quedaba darse una ducha e intentar descansar para el gran día.

¡A soñar con el camino que ya no queda nada!

Comparte esta entrada del blog:

Share on whatsapp
WhatsApp
Share on facebook
Facebook

Más para explorar

Deja un comentario